
Farsas y Juglarías
Espectáculo con escenas y músicas de carácter histórico (recreamos en ellas el medievo, la época romana, la Celtiberia, el barroco… ¡lo que se nos pida!). Y de vocación camaleónica: se adapta al escenario fijo o a las calles y plazas de la localidad; a castillos, parques, museos, balconadas; a fundir las escenas en una única representación, o a disgregarlas a lo largo del día; a personalizar la representación en cada lugar, o incluso, a incorporar actores, músicos, caballistas o espadachines del lugar… Un espectáculo darwiniano, en fin, que se transforma y evoluciona atendiendo a las características de cada ecosistema en el que se representa.