
RECREACIONES HISTÓRICAS
Pocas experiencias te recompensan tanto como que docenas de personas de una localidad, se pongan a tu disposición, y roben un montón de horas a su tiempo, a su ocio y a su familia, para convertirse por unos días en los protagonistas de un gran espectáculo: la historia de su pueblo, de su ciudad. Los Navegantes hemos capitaneado muchos de esos batallones pacíficos y joviales de hombres y mujeres, niños y niñas, jubilados, parados, estudiantes, amas de casa, obreros, funcionarios, que esos días se convierten en actores y músicos, en bailarines y caballistas, en pintores y escenógrafos. E inundan las calles de su pueblo para evocar los episodios más relevantes de su historia, de sus tradiciones o de sus leyendas; en definitiva, los episodios que entroncan profundamente con sus raíces, con sus señas de identidad.